En el primer semestre de 2023 la empresa láctea argentina Mastellone Hnos (La Serenísima) registró una pérdida antes de impuestos de 1833 millones de pesos. Sin embargo, en términos contables terminó el período con una ganancia de 2609 millones de pesos ¿Cómo es eso posible?
“Los resultados del primer semestre arrojan una ganancia neta básicamente generada por un resultado positivo en el impuesto a las ganancias”, explicó la compañía en su último balance.
La Ley de Reforma Tributaria (N° 27.430), modificada por la Ley N° 27.468, dispuso los parámetros de aplicación del procedimiento de ajuste por inflación en función de la variación del IPC en la medida que se cumpla ciertos parámetros de inflación anual para los años 2018, 2019 y 2020 y acumulada del 100% trianual a partir del año 2021. En ese marco, la norma definió que el ajuste positivo o negativo, según fuera el caso, correspondiente al primero, segundo y tercer ejercicio iniciados a partir del 1 de enero de 2018 que se deba calcular debería imputarse un tercio en ese período fiscal y los dos tercios restantes, en partes iguales, en los dos períodos fiscales inmediatos siguientes.
Esta forma de cómputo fue modificada el 23 de diciembre de 2019 por la Ley N° 27.541, la cual extendió el período de diferimiento de tres años a seis años. Es decir, que debe imputarse un sexto en el primer período fiscal que aplique el ajuste por inflación y los cinco sextos restantes, en partes iguales, en los cinco períodos fiscales inmediatos siguientes. A partir del cuarto ejercicio, desde los ejercicios iniciados el 1 de enero de 2021, el monto del ajuste por inflación impositivo se imputa en su totalidad en el mismo ejercicio.
“En el período fiscal 2022 y en el período fiscal de seis meses terminado el 30 de junio de 2023, la sociedad ha considerado que se cumplen los parámetros que establece la ley de impuesto a las ganancias para la aplicación del ajuste por inflación impositivo toda vez que se supera el 100% de inflación trianual acumulada establecida por la citada ley, tanto para los cierres de ejercicio o período intermedio”, indicó Mastellone Hnos.
“En consecuencia, la sociedad consideró el citado ajuste en la determinación del resultado por impuesto a las ganancias (corriente y diferido) del ejercicio económico finalizado el 31 de diciembre de 2022 y del período de seis meses terminado el 30 de junio de 2023”, remarcó.
Gracias a ese ajuste por inflación, instrumentado en función de la estrambótica y surrealista normativa diseñada por los burócratas del Estado nacional argentino, la compañía láctea terminó el primer semestre de este año con un resultado favorable.
“A la fecha de presentación de la declaración jurada del ejercicio fiscal 2022, la sociedad ha completado los análisis correspondientes junto con sus asesores fiscales expertos en la materia y han concluido que cuenta con sólidos argumentos para obtener una resolución favorable, por lo que ha computado los quebrantos en el ejercicio fiscal 2022 a su valor ajustado por inflación a efectos de compensar la ganancia fiscal determinada para dicho ejercicio fiscal en la presentación de la declaración jurada”, explicó la empresa.
Mastellone Hnos aplicó el mismo criterio para la estimación del cargo por impuesto a las ganancias corriente y diferido contabilizado en el período de seis meses terminado el 30 de junio de 2023.
Mastellone Hnos perdió un dineral en la Argentina, pero le va muy bien en Brasil ¿Por qué será?
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