La controversia del peaje en el tramo superior de la Hidrovía pretendido por la Argentina comenzará a tratarse ahora en el ámbito político luego de que la discusión técnica no lograra llegar a una solución.
Pese a la oposición de la Argentina, los demás países integrantes del Comité Intergubernamental de la Hidrovía Paraguay-Paraná (CIH), Bolivia, Brasil, Paraguay y Uruguay, resolvieron que en septiembre próximo se organizará una reunión en Brasil con el propósito de que un delegado del gobierno gestionado por el ministro Sergio Massa explique cuáles son los fundamentos a partir de los cuales pretende cobrar un peaje de 1,47 dólares por tonelada de registro neto al transporte fluvial que circula por el tramo “Puerto de Santa Fe-Confluencia” de la Hidrovía del Paraná.
Así lo informó el director general de la Marina Mercante de Paraguay, Patricio Ortega, quien integró la delegación paraguaya que participó de la última reunión del CIH, que se realizó el miércoles pasado en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, Bolivia.
“Básicamente, y conforme a la minuta que publicó recientemente Cancillería, los cuatro países que integran la Hidrovía Paraguay-Paraná, excepto Argentina, propusieron que se deje sin efecto el cobro de peaje hasta tanto se analice y se estudie de fondo el tema conforme al informe que va a presentar Argentina y si en este caso corresponde o no la aplicación del peaje”, puntualizó Ortega.
El funcionario indicó que el análisis ahora se va a llevar adelante en una reunión especial de carácter político dentro del CIH, pese a la oposición del representante de la Argentina, quien intentó mantener las negociaciones en el ámbito de la instancia técnica.
Ortega agregó que esta nueva reunión será convocada por Brasil y que en la misma Argentina deberá demostrar si existe o no servicio efectivamente prestado para el cobro del peaje, y así avanzar –en caso de ser necesario– en la aplicación del “Protocolo Adicional sobre Solución de Controversias”.
En la reunión realizada en Santa Cruz de la Sierra los delegados de Paraguay, Brasil, Bolivia y Uruguay ratificaron su rechazo al peaje impuesto por Argentina y solicitaron al país que suspenda la aplicación del mismo hasta tanto demuestre servicios efectivamente prestados a la navegación que justifiquen la medida. Requirieron además que la Argentina garantice la libertad de navegación. La posición de la Argentina, sin embargo, es seguir cobrando el peaje en cuestión.
En caso de no haber acuerdo en la reunión por realizar en Brasil, el Acuerdo de “Santa Cruz de la Sierra” sobre Transporte Fluvial por la Hidrovía Paraguay-Paraná establece la posibilidad de someter la controversia a la decisión de un Tribunal Arbitral, el cual debe integrarse con árbitros designados por los países signatarios de dicho acuerdo. Como todos los países, menos la Argentina, tienen una posición única en la materia, está claro cuál será la decisión del Tribunal; ese es el motivo por el cual la Argentina se negó desde el primer momento a tratar la cuestión en la instancia política.
La Comisión Permanente de Transporte de la Cuenca del Plata (CPTCP), entidad integrada por los usuarios de la vía navegable de los cinco países signatarios del Acuerdo, realizó un estudio que certificó que las condiciones hidromorfológicas del río en el tramo “Puerto de Santa Fe-Confluencia”, por sus profundidades naturales, permiten la navegación segura de las embarcaciones a 10 pies de calado, durante las 24 horas, sin necesidad de intervenciones de dragado. Y señaló además que el servicio tradicional de balizamiento, otro argumento empleado en su momento por los representantes argentinos para justificar el cobro del peaje, no sólo no es necesario en el tramo superior de la Hidrovía, sino que incluso puede llegar a ser contraproducente.
La entrada Hidrovía: Argentina deberá ahora dar explicaciones en Brasil sobre el fundamento del cobro del peaje rechazado por el resto de los países de la región se publicó primero en Bichos de Campo.