En 2024, las exportaciones de la industria láctea registraron un incremento tanto en volumen como en generación de divisas. Pero más allá de este dato, desde el sector advirtieron que el retraso cambiario podría significar un freno a este buen momento.
De acuerdo al Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA), el año pasado los despachos al exterior crecieron un 8,1% en cantidad y un 5,6% en dólares. Según el organismo, se exportaron 382.664 toneladas de productos, por un valor de U$S 1.412,4 millones.
Los industriales siguen de cerca la evolución del tipo de cambio, que tras la fuerte devaluación en diciembre de 2023, comenzó a ajustar a un ritmo mucho más bajo que la inflación.
Esto se debe al crawling peg del 2% ejecutado por el Ministerio de Economía, que tras los últimos datos de inflación bajó al 1%.
Esto hace prever que al menos por el momento, no habrá un salto en la cotización de la divisa norteamericana.
Según consdieraron desde el OCLA, este nuevo escenario echó por tierra todas las ventajas competitivas que representaron las últimas devaluaciones, el dólar “80/20” y el Contado con Liquidación, entre otras medidas.
Los cálculos del Observatorio muestran que el valor del dólar actual ya es menos competitivo que el que había en septiembre de 2023.
No se debe perder de vista que esas decisiones generan un panorama muy favorable para el eslabón exportador, a partir de la mejora en su poder de compra de leche.
“Sin lugar a dudas que la cadena debe mejorar la escala, eficiencia y productividad de su sector exportador, se deben corregir efectos adversos que genera el “costo argentino”, advirtieron.
Y agregaron: “Pero hasta que ello ocurra puede transcurrir mucho tiempo y este retraso cambiario haga que la exportación sea sólo para liquidar stocks o hacerse de recursos que no se pueden lograr en un mercado interno alicaído”.
Además, subrayaron que a la par de la eliminación de las retenciones, deberían reinstalarse los Reintegros de Impuestos Internos eliminados, bajo un criterio de proporcionalidad entre los diferentes productos.
EXPORTACIONES Y MERCADO DOMÉSTICO
En 2024,el organismo destacó que las exportaciones de leche crecieron un 7% en volumen y representaron el 25,1% de la producción total, en comparación con el 20,4% del año anterior.
Y tras un primer cuatrimestre donde las exportaciones superaron el 30%, se observó una caída significativa y cayeron por debajo del 20% en los meses posteriores.
Los principales destinos de las exportaciones lácteas durante el añopasado fueron Brasil y Argelia, con 58,8% y 29,2%, respectivamente.
El resto de los mercados -de acuerdo al relevamiento de OCLA- se dividieron entre Venezuela, Camerún, Libano y un 6,1% correspondió a “otros países”.
En este contexto, el precio medio de exportación de la leche fue de US$ 3.692 por tonelada, lo que representa una merma interanual de 2,3%. En el caso específico de leche en polvo, la cotización promedio fue de US$ 3.586 por tonelada, un 1,5% inferior a 2023.
El informe también analizó la evolución del precio de la leche en polvo en bolsas de 25 kilos, el producto más destacado en el comercio exterior lácteo. En este sentido, recordaron que a mediados de 2022 consiguieron los precios más altos en siete años, que luego fue seguido por una tendencia a la baja.
Para diciembre de ese año y comienzos de 2023, llegó a valer U$S 3.600 por tonelada. Posteriormente, se produjo una recuperación de precios, impulsada por los incrementos en las exportaciones hacia Brasil-
PRODUCCIÓN LOCAL VOLCADA AL COMERCIO EXTERIOR
Hasta noviembre, las exportaciones representaban el 20% de la producción total de leche, pero en enero alcanzaron un 33,2%, incrementándose progresivamente en febrero hasta un 38,6%.
Además de estos desafíos a nivel externo, el consumo doméstico enfrenta otros. Con una inflación que durante buena parte del año no dio tregua, su impacto llegó hasta la clase media, principal consumidora de productos lácteos de mayor valor agregado.
Este deterioro se reflejó en una disminución del consumo doméstico de 17% en la primera mitad del año en comparación con el período anterior, aunque existen señales de una posible recuperación hacia el final del año.