Este martes –¡sorpresa!– tampoco se publicó el decreto dela reducción de derechos de exportación para soja, maíz y girasol anunciada por el presidente Javier Milei en la Expo Rural de Palermo.
¿Por qué tanta tardanza para publicar un simple decreto? Sucede que el ministro Luis “Toto” Caputo está buscando la manera de asegurarse un cierto ingreso de flujo de agrodivisas con la implementación de la medida.
Para entender qué sucede al respecto es necesario repasar la historia inmediata. En junio pasado los agroexporadores registraron Declaraciones Juradas de Ventas Externas (DJVE) de productos agroindustriales por un volumen gigantesco de 23,532 millones de toneladas, de los cuales 19,909 millones se realizaron en el marco del régimen de rebaja temporaria de derechos de exportación.
Se cortó la “canilla” de las agrodivisas y “Toto” Caputo tiene que sacar otro “conejo de la galera”
Si le sumamos las operaciones registradas el 1 de julio que se hicieron para aprovechar el último día de vigencia del régimen de rebaja de retenciones, entonces la cifra total de junio comprendida en el programa suma 22,0 millones de toneladas.
Para tener una idea de lo que representa esa cifra, vale mencionar que en los primeros cinco meses de 2025 las registraciones totales de DJVE de productos agroindustriales sumaron 40,976 millones de toneladas.
La cuestión es que, una vez desaparecido el incentivo tributario, se esfumaron las registraciones de DJVE agroindustriales, que en los primeros 28 días del presente mes apenas suman una magra cifra de 1,59 millones de toneladas.
El régimen finalizado el 30 de junio (1 de julio para la registración de DJVE con el beneficio tributario) disponía que para aplicar la rebaja de la alícuota del derecho de exportación los agroexportadores tenían que abonar el 95% de las divisas de la venta en un plazo de hasta 15 días posterior al registro de la operación.
La cuestión es que ese plazo de 15 días hábiles expiró hace rato y desde entonces, al caerse la registración de DJVE, se cerró la “canilla” de ingreso de agrodivisas, ya que el trámite administrativo obligatorio para poder generar una exportación agroindustrial es precisamente esa declaración de embarques ante la Secretaría de Agricultura de la Nación.
Mientras que a partir de la tercera semana del mes de julio el ingreso de agrodivisas comenzó a decrecer, desde el pasado 25 de julio se derrumbó al acabarse el flujo proveniente de las registraciones realizadas en el marco del régimen de rebaja de retenciones.
El equipo económico liderado por el ministro Luis “Toto” Caputo esperaba que, una vez finalizada la versión libertaria del “dólar soja” de Sergio Massa, las declaraciones de embarques de cereales de invierno tomaran la “posta” para garantizar un flujo razonable de divisas hasta las elecciones legislativas nacionales de octubre próximo.
En ese escenario, a fines de junio pasado el gobierno extendió el régimen de rebaja de retenciones de trigo y cebada hasta el 31 de marzo de 2026 y dispuso que las compañías agroexportadoras, luego de registrar embarques de trigo, cebada, malta o harina de trigo, pasaban a contar con un plazo de hasta 30 días hábiles para ingresar el 90% del monto de la operación registrada.
Pero eso no sucedió porque los bajos precios internacionales del trigo –que en la Argentina son aún más bajos gracias a los derechos de exportación– desincentivan la realización de negocios.
El último dato oficial disponible, correspondiente al pasado 16 de julio, indicaba que los productores argentinos apenas habían vendido por anticipado 1,99 millones de toneladas de trigo 2025/26, de las cuales 1,58 millones no tenían precio hecho (ventas “a fijar”).
La contrapartida de esa “sequía” comercial es que los exportadores no registraron una sola tonelada de DJVE de trigo 2025/26 y, por lo tanto, sin ese trámite no se produce el ingreso de divisas a la economía argentina. Tampoco se declararon embarques de cebada 2025/26.
En tal escenario, las reservas internacionales del Banco Central (BCRA) comenzaron a estar comprometidas al no disponer de ingresos genuinos (el aporte del agro no puede ser compensando por otros sectores de la economía) en un contexto de alta presión de demanda por compra de particulares, turismo e importaciones.
La entrada Todavía (¿todavía?) no se oficializó la rebaja de retenciones: La historia detrás de la historia de una medida desesperada se publicó primero en Bichos de Campo.