El Tipo de Cambio Real Multilateral (TCRM), que mide qué tan competitivo es el tipo de cambio en la Argentina respecto de mercados que integran la matriz comercial del país, mejoró de manera notable esta semana para regresar al nivel más elevado de 2022.
Sin embargo, debido a la aceleración inflacionaria que viene en camino, para febrero del año que viene esa mejora de la competitividad externa se licuaría por completo para volver a “fojas cero”.
Eso implica que, en principio, se inicia una suerte de “cuenta regresiva” en la cual el “dólar exportador” comenzará, día tras día, a perder competitividad y, por lo tanto, atractivo para motorizar el ingreso de divisas.
La apuesta del equipo económico liderado por el ministro Luis Caputo es que, ya sin restricciones ni cupos para exportar, el sector agroindustrial argentino aproveche estas semanas para realizar exportaciones aluvionales y así inyectar un volumen considerable de divisas antes de que el tipo de cambio vuelva a atrasarse.
Algo de eso ya se pudo observar este jueves con registraciones de Declaraciones Juradas de Ventas Externas (DJVE) de harina de trigo por un volumen de 12.027 toneladas, la mayor parte de las cuales fueron inscriptas por el Grupo Cañuelas para embarque por realizar entre diciembre y marzo próximo.
Claro que, para que ese proceso pueda consolidarse, es necesario activar la originación de mercadería, lo que implica que los precios ofrecidos deben ser lo suficientemente atractivos para incentivar ventas por parte de los productores.
Qué sucederá cuando la ventaja competitiva cambiaria se haya licuado por completo es materia de especulación, aunque claramente la apuesta de Caputo será evitar para entonces un nuevo ajuste del tipo de cambio oficial con el propósito de comenzar a desinflar el proceso inflacionario.
Eventualmente, podría cambiar la proporción del “dólar exportador”, confiriéndole una mayor participación del “contado con liquidación” para propiciar una nueva suba del TCRM sin comprometer el “ancla” del tipo de cambio oficial.
Para que ese proceso pueda resultar exitoso es indispensable cortar con el flujo recurrente de emisión monetaria y llegar a un “déficit cero” en la administración pública nacional por medio de recorte del gasto y suba de impuestos (como es el caso de las retenciones al 15%).
Con la inflación proyectada para el trimestre Dic-Feb, de mantener el crawling peg en torno al 2% MoM, se llegaría a finales de Febrero con un tipo de cambio real de:
-31/12: $ 647
-31/1: $ 521
-28/2: $ 426
Con una inflación tan por encima del ritmo del tipo de cambio, una… pic.twitter.com/wos1gxGTWG
— Salvador Vitelli (@SalvadorVitell1) December 14, 2023
La entrada Cuenta regresiva: En apenas dos meses se licuaría por completo la actual competitividad cambiaria se publicó primero en Bichos de Campo.