Brasil, Uruguay y Bolivia se sumaron al pedido de Paraguay para que la Argentina deje de aplicar de manera unilateral el cobro de un peaje de 1,47 dólares por tonelada al transporte de cabotaje que circule por el tramo Puerto de Santa Fe-Confluencia de la Hidrovía del Paraná, que es por donde pasan las barcazas con soja paraguaya que luego se embarcan en terminales portuarias de la zona de influencia de Rosario.
Sin embargo, el gobierno argentino mantuvo su posición y no sólo siguió cobrando el peaje, sino que además va camino a promover un insólito conflicto regional a partir de un hecho que encendió las alarmas en Paraguay.
El viernes pasado, el Juzgado Civil y Comercial Federal Feria CCF 10101/2023 a cargo de José Luis Cassinero, ordenó la interdicción de navegación de los remolcadores HB Phoenix de bandera boliviana y HB Grus de bandera paraguaya hasta la cancelación de deuda en concepto de pago de peaje impuesto por la Administración General de Puertos (AGP). Ambos remolcadores, que pertenecen a la naviera brasileño Hidrovías do Brasil, permanecen el puerto de San Lorenzo.
Luego de conocido el hecho, el fin de semana el Ministerio de Relaciones Exteriores de Paraguay transmitió a su contraparte argentina un reclamo para una pronta solución del problema.
Por medio de una nota formal, la Cancillería paraguaya solicitó que las autoridades respectivas adopten las medidas necesarias para garantizar la libertad de tránsito de las embarcaciones de bandera paraguaya en apego con el espíritu del Acuerdo de Santa Cruz de la Sierra de Transporte Fluvial por la Hidrovía Paraguay-Paraná.
En la nota señaló que “luego de ocho meses de consultas entre los países signatarios y con base en la información técnica provista por la Argentina, en la última reunión de la Comisión del Acuerdo las delegaciones de Brasil, Bolivia, Paraguay y Uruguay concluyeron que no se demostró la ejecución efectiva de intervenciones requeridas o servicios efectivamente prestados para la navegación segura en el tramo en cuestión que justifiquen el cobro de una tasa retributiva acorde al alcance establecido en el artículo 9 del Acuerdo de Santa Cruz de la Sierra”.
Y enfatizó que Argentina insiste en implementar “medidas que, lejos de apurar un entendimiento, tienden a agravar la diferencia instalada y la afectación ocasionada a los usuarios de la vía navegable con repercusiones considerables en la economía y el comercio exterior de los países signatarios”.
El costo del nuevo peaje, tal como sucede con la tarifa de 3,06 dólares por tonelada de registro neto embarcada en el tramo inferior del Paraná, debe ser descontado por las empresas exportadoras del precio de la soja recibido por los productores paraguayos, lo que implica que se transformó, en los hechos, en una “retención” aplicada por un país a otro del Mercosur.
La Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco) estima que el sobrecosto generado por el peaje para el comercio exterior del país sería de unos 40 millones de dólares anuales. Se trata de una cifra que, para una nación pequeña como Paraguay, es mucho dinero.
Con Colegas presentaremos #ProyectoDeDeclaracion Que condena la interdicción de navegación a los remolcadores HB GRUS de bandera paraguaya y HB PHOENIX de bandera boliviana, ordenada en fecha 28 de julio de 2023 por el JUZGADO CIVIL Y COMERCIAL FEDERAL – FERIA CCF 10101/2023, a…
— Bachi nuñez (@bachinunezpy) July 29, 2023
La entrada La angurria fiscal kirchnerista ya no respeta fronteras: Argentina va camino a promover un conflicto abierto con sus pares del Mercosur en su afán de cobrar peaje en la Hidrovía se publicó primero en Bichos de Campo.