Mientras los productores argentinos están alterados por la inflación, la incertidumbre cambiaria y la sequía –que no se quiere ir de muchas regiones productivas–, el gobierno argentino silenciosamente incrementó de manera indirecta las retenciones al maíz.
En las últimas jornadas los valores FOB de los productos del maíz fijados por la Secretaría de Agricultura comenzaron a subir de manera desproporcionada con respecto a las referencias presentes en Brasil y EE.UU.
Mientras que el valor del maíz brasileño y estadounidense bajó, el argentino, extrañamente, subió. Y eso porque los valores FOB tomados como referencia en el caso argentino corresponden a los publicados por la Secretaría de Agricultura, los cuales deben emplearse tanto para calcular el derecho de exportación (que se paga por adelantado en un 90%) como la liquidación final por ingresar al momento de concretar el embarque. Eso implica que, al incrementar dicho valor FOB, lo que ocurre es que aumenta la base imponible y, por lo tanto, de manera indirecta se incrementa la “retención” vigente sobre el cereal.
Es decir: las autoridades de la Secretaría de Agricultura tienen la manera, a través del “toqueteo” de los FOB oficiales, de incrementar los derechos de exportación. A veces de manera disimulada y otras, como en el caso reciente del maíz, alevosa.
Al tomar el valor FOB oficial de maíz vigente ayer miércoles, por ejemplo, de 251 u$s/tonelada, el mismo, con una alícuota del 12%, representa un monto en concepto de derecho de exportación de 30,1 u$s/tonelada. Pero el mismo sería de 26,8 u$s/tonelada si se considerara un valor equivalente al brasileño. La diferencia entre ambos representa, para un buque de 30.000 toneladas, un cobro adicional de 100.000 dólares. No es poca cosa.
Con las sucesivas prórrogas de los plazos de embarque de maíz otorgadas por el gobierno nacional, los exportadores están “compradísimos” en maíz. Sin embargo, la registración de embarques se produce a cuentagotas a la espera de que los precios oficiales del cereal se alineen con las referencias internacionales. Nadie quiere pagar demás.
Si bien este año Argentina logró una cosecha muy pobre de maíz (apenas 34 millones de toneladas) a causa de un desastre climático histórico, Brasil generó un cosechón que le permite exportar volúmenes récord del cereal para deprimir los valores FOB regionales.
La entidad brasileña que agrupa a las compañías exportadoras de granos (Anec) proyectó que en el presente mes de octubre exportará maíz en un rango de 8,50 a 9,31 millones de toneladas, mientras que en octubre de 2022 esa cifra había sido de 6,17 millones de toneladas.
La entrada Mientras los productores siguen mirando el cielo para ver cuando llueve el gobierno aprovechó para incrementar las retenciones del maíz se publicó primero en Bichos de Campo.